viernes, 30 de octubre de 2015

Ave que dudas en escapar de tu jaula


Ave que dudas en escapar de tu jaula cuando esta se abre, sé que ya no deseas seguir en ella. Pero buscas un horizonte seguro en tu futuro y, al no tenerlo, vacilas en quedarte o emigrar.

¿No sería acaso más valiente arriesgarse y volar al infinito, más allá de lo permitido por tu actual encierro? Si tan solo te atrevieras a extender tus alas blancas... ¡brillarías como un pájaro de fuego! 

Al fundirte con los vientos, créeme, alcanzarás dónde construir tu anhelado nido. Ahí, podrás fecundar lo mejor de tus posibilidades, en un árbol que sólo caerá por el designio de la naturaleza.